lunes, 11 de marzo de 2013

El Palacio de la Música (1): historia

Dirigimos nuestra mirada al Palacio de la Música, cuando todo parece indicar que va a ser reconvertido en una tienda de moda, en lo que, desde nuestro punto de vista, constituye un nuevo atentado contra el patrimonio histórico, artístico y cultural de los madrileños.



El Palacio de la Música fue construido entre 1924 y 1926 en el segundo tramo de la Gran Vía, muy cerca de la Plaza del Callao. Su promotora, la Sociedad Anónima General de Espectáculos, lo concibió como una gran sala de entretenimiento, que sirviese tanto para conciertos como para exhibiciones cinematográficas. Se llamó en un primer momento Sala Olimpia y, más tarde, Cine SAGE.

El proyecto recayó sobre el arquitecto vasco Secundino Zuazo Ugalde (1887-1971), quien, debido a este doble uso, desestimó la clásica planta de herradura rodeada de palcos para adoptar el modelo imperante en Estados Unidos: un enorme patio de butacas dispuesto en filas paralelas y uno o más anfiteatros enfrentados al escenario, con un gran Sala de Descanso y un bar mirando a la calle.

Zuazo también diseñó un ábside semicircular detrás del escenario, reservado para la orquesta, al tiempo que incorporó una sala de fiestas en el sótano, dotada con una espectacular pista de baile circular, y un cine al aire libre sobre la cubierta, que se utilizaría en verano.


Desplome de la cubierta (1925).

Esta última instalación pudo ser la causante del derrumbamiento que se produjo el 4 de diciembre de 1925, cuando apenas quedaban once días para la apertura del complejo. La cubierta se desplomó, provocando la muerte de una mujer, que vivía en una casa vecina.

En enero de 1926 se iniciaron los trabajos de reconstrucción (eso sí, con la eliminación del cine de verano), que se prolongaron once meses. El 14 de noviembre tuvo lugar el acto inaugural con la proyección de la película muda La Venus americana, si bien en 1929 la sala se convertiría en una de las pioneras del cine sonoro en España.

El escenario, tras el incendio de 1932.

En noviembre de 1932 un incendio destruyó el ábside del escenario, además de provocar numerosos daños. Durante la rehabilitación, se tomó la decisión de dedicar la sala únicamente a usos cinematográficos, lo que supuso la desaparición de todos los elementos destinados a la celebración de conciertos. 

Así, los dos soberbios órganos que enmarcaban el escenario a ambos lados fueron sustituidos por dos cadenas de candilejas en forma de venera, no menos espectaculares. Al mismo tiempo, se sacrificó parte de la ornamentación neobarroca para reformar la cabina de proyecciones.


Entre 1942 y 1952 el Palacio de la Música recuperó su actividad musical, como sede de la Orquesta Nacional de España, pero sin abandonar las exhibiciones cinematográficas. 

En 1957 el propio Secundino Zuazo añadió una nueva planta sobre la cubierta, para ser utilizada como oficinas y talleres. Y en 1983 el arquitecto Enrique López Izquierdo Camino dividió la sala en multicines, con resultados no muy afortunados.

Tras su cierre definitivo como cine, en 2009 la Fundación Caja Madrid adquirió el edificio para transformarlo en auditorio. La Dirección General de Patrimonio Histórico dio su visto bueno, con la condición de mantener su uso cultural originario.



El proyecto de acondicionamiento fue encargado al arquitecto José Luis Rodríguez Noriega, quien dirigió sus esfuerzos a recuperar el aspecto original de la sala, aunque con lógicas modificaciones, necesarias para adaptar el recinto a la exigencias actuales, como ciertos cambios en la concha del escenario.

En 2012, con el 80% de los trabajos acabados, la titularidad del inmueble pasó a Bankia, que, hace apenas unas semanas, ha proclamado su intención de venderlo con fines comerciales. Algo que, con la ley en la mano, no es posible, al estar consagrado el edificio única y exclusivamente a usos culturales.

Concretamente, el Plan General de Ordenación Urbana de Madrid (PGOUM) le aplica un nivel de protección integral, que supone el mantenimiento del uso al estar situado en el Área Cultural Preferente de Gran Vía.



Hasta ahí todo bien. El problema llega cuando el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid, máximos responsables de conservar el patrimonio de la ciudad y de hacer cumplir la ley, no sólo han anunciado que van a cambiar el uso cultural del Palacio de la Música por un uso comercial, sino que también van a flexibilizar las normativas sobre protección de edificios históricos.

Si nadie lo remedia, el Palacio de la Música será en breve una tienda de moda, probablemente de la marca Mango. Los madrileños habremos perdido una sala de conciertos casi terminada, cuya recuperación ha costado varios millones de euros, y se habrá puesto en peligro una magnífica arquitectura, patrimonio de toda la ciudad.


Fotografías

La primera imagen es de autoría propia. Las restantes fotografías a color pertenecen al Ayuntamiento de Madrid y fueron realizadas antes de la última reforma acometida en el edificio (a partir de 2009), destinada a reconvertirlo en sala de conciertos. Las fotos en blanco y negro fueron publicadas por las revistas Mundo gráfico en 1925 (derrumbamiento) y Nuevo Mundo en 1932 (incendio). 

17 comentarios:

  1. Estupendo reportaje, Jesús. Cuanto sinsentido. Se hacen teatros nuevos feos y carísimos solo para mayor gloria de los regidores y se abandonan teatros maravillosos como este. Convertirlo en tienda de ropa, aparte de un crimen, es pan para hoy y hambre para mañana, porque Madrid es cada vez con más fuerza un destino turístico y cultural que busca espacios como este.

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    1. Hola Carlos:
      Gracias por tus palabras y por tu afán divulgativo con este tema (ya vi que publicaste una magnífica entrada dedicada al Palacio). No lo puedes decir mejor: pan para hoy y hambre para mañana.

      Un abrazo, Jesús

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  2. Jesus, os dejamos estos dos enlaces:

    Firmas para salvaguardar el uso exclusivamente cultural del Palacio:

    https://www.change.org/es/peticiones/salvaguardemos-el-uso-exclusivamente-cultural-del-palacio-de-la-m%C3%BAsica-solodelamusica?utm_campaign=url_share_after_sign&utm_medium=url_share&utm_source=share_petition

    Facebook Palacio de la Música:

    https://www.facebook.com/pages/El-Palacio-de-la-M%C3%BAsica-Madrid/329702650468711

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    1. Hola Fran:
      Gracias por los dos enlaces. Ya firmé en el primero y animo desde aquí a seguir firmando. A ver si conseguimos que no se realice esta barbaridad.

      Un fuerte abrazo, Jesús

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  3. Hola Jesús,
    Otro tema de debate que casi prefiero no debatir para que no se me escapen palabras gruesas. ¡Indignante!
    Lo que sí podríamos flexibilizar es la forma en que elegimos a nuestros cultos representantes.
    Ojalá lleguen tus preces al altísimo de turno.
    Fantástico trabajo de documentación y denuncia.
    Un abrazo.

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    1. Hola Manuel:
      "Flexibilizar" es otro de esos palabros que se han puesto ahora de moda, para no decir lo que realmente se debería decir. Vivimos en una ciudad, en un país, con mucha cortedad de miras. La crisis se ha convertido en una excusa para todo. Se ha abierto la veda. Lamentablemente creo que esto no ha hecho más que empezar.

      Un abrazo y muchas gracias, Jesús

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  4. No quiero ni acordarme de lo con tento que me puse cuando leí la noticia de que se iba a convertir en un auditorio en plena Gran Vía, después vino la desesperación y la impotencia como siempre de ver convertido un magnífico edificio en tienda de ropa, que asco, y que pena de país donde cada día perdemos un trocito de cultura por la incompetencia de nuestras autoridades. Si tuviera dinero yo mismo compraría el edificio y lo convertiría en la sede de la orquesta de RTVE

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    1. Hola Bélok:
      Es lo que tiene esta ciudad, que pasas de la mayor alegría a la tristeza más profunda de la noche a la mañana. Tan pronto nos dicen que somos los más maravillosos de Europa, el Madrid de la excelencia como diría aquel, como nos engañan como a bobos, diciendo que es el único camino posible. Si no exploran otros caminos, es porque son muy malos gestores. No nos lo merecemos.

      Muchas gracias y un abrazo muy fuerte, Jesús

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    2. Hola Jesús,
      Es algo indignante. Yo firmé hace tiempo e hice mi pequeña campaña entre colegas. Un gran restaurador (eso creía yo) me respodió que no lo veía claro. Más indignación. En rueda de prensa, nuestra corregidora argumentó que así se crearían muchos puestos trabajo. ¡Tambien se crearían muchos más convirtiendo el Palacio de Cibeles en centro comercial pero a nadie se le ocurre decir esa barbaridad!. Sabemos que el Ayuntamiento tiene parte mayoritaria en la antigua Fudación Cajamadrid y por tanto necesitan ir tapando sus agujeros vendiendo las "joyas de la abuela". Pero estas joyas pertenecen a Madrid, aunque no quieran ni sepan verlo.
      Un abrazo.

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    3. Hola Antonio:
      Tienes tanta razón, que no puedo por menos que compartir tu indignación. El "vale todo" no puede ser la bandera de un ayuntamiento que está obligado a proteger y conservar nuestro patrimonio cultural. Como bien dices, no es algo suyo, sino que pertenece a Madrid, a todos nosotros.

      Gracias por tu comentario. Un abrazo, Jesús

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  5. Hola Jesús, precioso reportaje y magnífica denuncia. Hay muchas personas en Madrid clamando por lo que está claro sería un crimen, y una grave pérdida. A lo mejor se consigue pararlo, ojalá.
    Qué bonito es el Palacio de la Música, y debería seguir siendo... un palacio para la música.

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  6. Hola Mercedes:
    Ojalá se consiga parar la conversión de este precioso edificio en tienda, pero mucho me temo que no y que además otros edificios históricos seguirán su misma suerte. Con la excusa de la crisis, vale todo...

    Gracias por tus palabras. Un abrazo fuerte, Jesús

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  7. Hola Jesus. Bonito post. Lo malo es que se pasa de la alegria de ver un precioso edificio, rehabilitado para fines culturales, a la pena, el cabreo, etc. ante la mera posibilidad de que lo vendan, los HGFRFFD! de siempre, con justificaciones tan peregrinas. Como se dice: Madrid me mata!
    Esperemos que alguien les ilumine, y nos sigan adelante.
    Un abrazo.

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    1. Hola José:
      Esta ciudad nos tiene acostumbrados a relaciones de amor/odio, alegría/pena... No tiene término medio.

      Gracias por tu comentario. Un abrazo, Jesús

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  8. Me ha encantado el post. Soy Madrileña del centro, he crecido al lado de este bonito edificio, y he entrado varias veces. Esperemos que no se convierta en un centro comercial, sería muy triste quitar su uso cultural.
    ¡Un saludo!

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  9. Gracias Sara por tu comentario. Ojalá suceda como dices. Un abrazo, Jesús

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  10. La música es cultura, y como tal, debe existir grandes escenarios donde se cree y se exponga. Todos nosotros hemos tenido algún otro contacto con la música, y muchos también hemos intentando crearla por nuestra propia cuenta.

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