lunes, 20 de enero de 2014

La antigua sede de 'El Correo Español'

Nos dirigimos al número 14 de la Calle de Pizarro, en pleno barrio de Malasaña, donde se encuentra la antigua sede del periódico El Correo Español, un edificio de principios del siglo XX, convertido hoy día en hostal, con el que recuperamos la sección "Modernismo madrileño".

Se trata de una de las pocas obras que quedan en pie en nuestra ciudad de Mauricio Jalvo Millán (1867-1932), un arquitecto que desarrolló un estilo imaginativo y personal, a partir de rasgos modernistas libremente interpretados, combinados eclécticamente con otros elementos.



El Correo Español fue fundado en el año 1888 por el periodista Luis María de Llauder, como la gaceta oficial del Partido Carlista. Contó con el impulso de Enrique Aguilera y Gamboa, el célebre marqués de Cerralbo, a quien los madrileños debemos la magnífica casa-museo que lleva su nombre, situada en el barrio de Argüelles.

A principios del siglo XX el periódico se hizo con un inmueble en la Calle de Pizarro, donde, además de instalar sus oficinas y rotativas, terminaría creando la llamada Casa de los Tradicionalistas, alentado por el partido que le auspiciaba.

Mediante esta iniciativa, los carlistas darían la réplica a las Casas del Pueblo, que el Partido Socialista Obrero Español estaba implantando con notable éxito en numerosos puntos del país.



El proyecto de remodelación y acondicionamiento fue encargado en 1910 a Jalvo Millán, curiosamente el mismo autor que, dos años antes, había levantado en la Calle de Piamonte la Casa del Pueblo más grande de España, sin duda alguna una de sus mejores creaciones, tristemente derribada en 1953.

La inauguración tuvo lugar el 9 de marzo de 1912, tal y como recogió la publicación semanal Nuevo Mundo, que se mostró muy complaciente con los resultados: "del antiguo caserón, destartalado y ruinoso a la magnífica Casa de los Tradicionalistas, que hoy ocupa aquel lugar, media una gran diferencia, salvada por el arte, el talento y la constancia del arquitecto, que ha tenido que vencer dificultades casi insuperables".


El inmueble, antes y después de la intervención de Jalvo. Revista 'Nuevo Mundo' (1912).

Del edificio ideado por Jalvo Millán se conserva prácticamente intacta la fachada, no así el interior, que ha resultado muy transformado con el paso del tiempo, sobre todo a raíz de su adecuación como hostal. Su última gran reforma tuvo lugar en la primavera de 2008.

Haciendo gala de su particular eclecticismo, el arquitecto planteó una fachada asimétrica, en la que pueden distinguirse dos influencias principales. La secesión vienesa parece vislumbrarse en la planta baja, en el mirador lateral, en las pilastras y en el ático, mientras que en los ventanales y en el balcón principal se recurre al neogótico.



Según los investigadores Óscar Da Rocha y Ricardo Muñoz, esta duplicidad obedecía al deseo de diferenciar los dos usos con los que fue concebido el edificio. La función periodística quedaba representada en una corriente de vanguardia, como el modernismo austriaco, mientras que las soluciones neogóticas referenciaban el ideal de la Casa de los Tradicionalistas.

Los citados autores también destacan la singularidad del inmueble en el contexto arquitectónico madrileño, por la "adopción de un estilo medievalista, más habitual en la arquitectura religiosa que en la industrial o comercial".

Y terminamos con una breve reseña a los trabajos de forja que decoran los vanos de la planta inferior y, sobre todo, el balcón principal, con su barandilla y las dos soberbias lámparas que flanquean los lados.



Bibliografía

El Marqués de Cerralbo (1845-1922): biografía política, de Agustín Fernández Escudero. Universidad Complutense. Madrid, 2012

Revista Nuevo Mundo, número 949 (14 de marzo de 1912), página 32. Hemeroteca Digital de la Biblioteca Nacional de España.

Madrid modernista: guía de arquitectura, de Óscar Da Rocha Aranda y Ricardo Muñoz Fajardo. Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Madrid, 2007

El modernismo en la arquitectura madrileña: génesis y desarrollo de una opción ecléctica, de Óscar Da Rocha Aranda. Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 2009

Historia de la Calle de Pizarro (antes de la Magdalena Alta), de M. R. Giménez. Blog Antiguos cafés de Madrid y otras cosas de la Villa, Madrid, 2012

10 comentarios:

  1. Buenos días, Jesús:

    No conocía el edificio. Me ha parecido muy interesante esa dualidad funcional, que se transmite también en la propia estructura del edificio.

    Tampoco había visto nunca cómo se citaba un blog. ¿Estás siguiendo alguna norma?

    Muchas gracias por descubrirnos estos rincones de Madrid. Que tengas un buen día.

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    1. Hola Anónimo Castellano:
      Gracias por tu comentario. Es un edificio muy curioso y, desde luego, una grata sorpresa en una calle tan recoleta como la de Pizarro. Con respecto a la cita, he ido por libré, je je, pero me pareció una forma correcta de indicar la fuente.

      Un abrazo, Jesús

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  2. Hola Jesús,
    Como bien apuntas, sólo hay dos edificios en pie de Jalvo Millán en Madrid, el que nos traes y otro más académico en Velázquez esquina Gurtubay. Pero en la guía del COAM se contabilizan hasta 26 panteones y mausoleos de él en los tres cementerios de La Almudena. Aquello es como una mina del modernismo y secesión vienesas.
    El edificio, que conocí en uno de los paseos de Carlos Osorio, es un rara avis. En mi opinión, el historicismo vence al secesionismo vienés en la lucha estilística que mantienen, cosa por otro lado natural teniendo en cuenta el ideario tan tradicionalista de su promotor.
    Enhorabuena por el trabajo y un abrazo

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  3. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  4. Hola Antonio nuevamente:
    No sé que ha pasado, pero he debido borrar involuntariamente la respuesta que te di hace unos días. Así que te la escribo otra vez. Agradecerte como siempre tus aportaciones y reivindicar el valor del Cementerio de la Almudena, un conjunto excepcional que debería ser mejor conocido y promocionado.

    Un abrazo y disculpa el despiste, Jesús

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  5. Un edificio muy bonito. Gracias por darlo a conocer.

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  6. Gracias a ti, Nacho. Me alegro de que te haya gustado.

    Saludos!!!

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  7. ¿Nadie se ha fijado en la bandera arco-iris del lobby homosexual que cuelga del balcón? Además, el trapo ocupa la posición de honor que le corresponde a la bandera nacional, en contra de lo que dicta la ley de banderas.

    Parece que viendo que era un edificio carlista importante, hayan querido burlarse del catolicismo y la tradición de esta manera.

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    1. No es burla al carlismo. El hostal es gay frendly. Por eso la bandera central es arcoiris. Además la ley a la que aludes sólo se aplica a edificios públicos.

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  8. He vivido en ese edificio 8 años y vi como lo rehabilitaban. Es un sitio muy especial.

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